sábado, 30 de octubre de 2010

Silencio, se rueda

Hay un silencio entero
sin quebranto posible

Tal vez
dibujado en los espacios siderales
o en el abismo impensable de las tumbas.
Todo puede ser.

En la forma maniquea del poema
artilugio en agonía permanente
aparece en el borde de la palabra
en el llanto conocido del signo
y en la sucesión sin destino
de la mentira mejor vestida.

Es un animal indomable
amenazado e huidizo
entre mandíbulas en movimiento
y latas de conserva
en los vertederos de la riqueza

Desesperadamente inútil
se lanzan rutas invisibles
- versos en crecimiento -
para este pájaro sin esperanza
en las habitaciones oscuras
de las noches invernales

viernes, 29 de octubre de 2010

.

El viento
enreda en torbellinos verticales
el calor interminable
de la crueldad de los desiertos
y la memoria
ha quedado impresa
en los carteles desnudos
a la sombra de las aldeas

El mar incorrupto del olvido
vacío permanente en la castidad
lo cubre todo.

El poema
gestiona palabras
y almacenes de recuerdos
en los abismos más insólitos
de uno mismo.

jueves, 21 de octubre de 2010

Irrecuperable

La memoria irrecuperable
de la pobreza
se disipa pèrmanente
en el vacío doloroso
de ciertos intestinos desconocidos.

La miseria
se olvida de si misma
en la pendiente del tiempo
en un intento desesperado
de no encontrarse nunca.

Aparecen oraciones
y viajeros desnudos
con lenguas de trapo
en la adversidad de los desiertos
prometiendo una mentira despiadada
de cielos y prostíbulos permitidos.

La locura está en marcha
y los cuchillos sin dueño
se mueven ágilmente
en el acopio inútil
de tanto desperdicio.

Agoniza la fertilidad
en la mirada de los lagartos.

martes, 19 de octubre de 2010

la última frontera

la luz
es ya un liquido insano
que soporta lo peores deseos
y juega sin descanso
con las arenas más finas
de la pobreza en uso.

Sólo la noche
puede curar tanto delirio

domingo, 17 de octubre de 2010

Sin permiso de uno mismo

En los desiertos
las distancias no han sido inventadas
y la luz
- animal previsible sin permiso -
engendra otra luz
e inventa fuego en los matorrales
y dioses de verdades inciertas.

La pobreza
huele a letrina descubierta
y madera quemada
en los pozos de la miseria

La vida
de forma incomprensible
se aferra a si misma.

No hay mucho más

viernes, 1 de octubre de 2010

La caída

En la invisible
agonía de tus labios
he visto la calamidad de los caminos
llenos de seres animales y barbarie
huyendo de alguna guerra.

Artilugio endemoniado
que nada tiene de arte
más bien carnicería organizada
y putrefacción en los armarios.

El miedo
en las ciudades descubiertas
como talleres en desorden
y noticias en la incertidumbre,
rueda solo y glorioso
en esta infección desmedida
de miseria y llanto.