domingo, 28 de junio de 2009

Anverso


En el anverso
de la mano extendida
durmiente sobre la nada
la creación
tanteaba destinos
mutilaba sueños
y sellaba complaciente
algunos juegos de alcoba,
sin más esmero
que su propia mirada

Tanta soledad había

sábado, 27 de junio de 2009

En ruta


Uno puede estar viejo
-lo suficiente-
para ser poeta
o para vivir acorralado
con la manos atadas
y esperar tranquilamente
el paso de casi todo.

Pero ser joven
y esperar todo ello
es poco tiempo
para tanta ruta.

La mirada del pavo


De esta gravedad
física corpórea
que nos permuta cada día
que nos empuja inconsciente
al barullo epidérmico
de mil palabras sin rumbo
nada va a quedar.
Sólo la ausencia
-sin negar nada-
abúlica y anodina
permanecerá.

A veces
aterrizamos inútilmente
en los grafos de un poema
o el paso de un muerto
nos recuerda irreductible
la parodia de casi todo,
excepto ese rango intangible
de lo sentido.

¿Qué sabe
la mirada del pavo
de tanta prisa?.

INPERTENENCIA


Tengo la alegre conciencia
de no pertenecer a lado alguno
a rebaño con horizonte
a bandera con discurso
o a plataforma sin discusión.

Tanto libre soy
que a todos pertenezco
de todos soy
soy sólo palabras
e inútiles poemas
que no sé a donde van.

Estar en ningún lado
y serlo en todos
no es un principio
ni un método
sino un viaje
perentorio y último
sencillo y claro.

Alguna vida debe ser.

miércoles, 24 de junio de 2009

No te engañes


En las guerras
a los muertos
se los llevan sin avisar.
Son vivos todavía
pero con las prisas
los odios y las ordenes
-condenados les llaman-
es como si fueran muertos.

Nunca fueron
estos artefactos de la infamia
programados para los vencidos
ni entraron en los partes
ni en el marcapasos vergonzoso
de los triunfos galopantes
el recuerdo de las víctimas
ni el llanto de las familias,
y menos aún
la sorpresa imposible de los niños
ante tanto disparate.

Como locos se comportan
aunque hablen como cuerdos
no te engañes.

lunes, 22 de junio de 2009

Regreso

El regreso a uno mismo
todos los días
desde la lucidez diáfana
del estío de la soledad
mirándonos con sorna
al galopante y terco
camino del sueño,
nunca ha sabido
- apenas nada -
del rutilante paso
de las imágenes colereadas
de aquello que ofrecemos
masticamos deglutimos
y arrojamos mudos
en un sedimento de ocasión.

Poco hay más allá
de este ser en venta
de estas vísceras bien compuestas
vestidas para alimentar
hormonas pupilas bocas
y otros diablos hambrientos
aparentemente sumisos.

Al final
diez minutos vivos
en el abismo olvidado
de nosotros mismos
sólo dan
para salvar sin compasión
aureolas diplomas y trofeos
premios de tómbolas olvidadas
y recortes clasificados
sin referencias alguna
al verdadero paso del hombre.

martes, 9 de junio de 2009


Siempre
ser o estar en algún lado
no es importante.
Permanecer en alguien
lo es todo.

martes, 2 de junio de 2009

Envoltorio suicida


La muerte
envoltorio suicida
que arrebata los últimos estíos
de aquellos pasos engalanados
que sobrevive en los tugurios
más tétricos del olvido
y sueña siempre canalla
los vestigios de todo aquello
que llaman vida,
nada merece
sólo una espesa calma
ante el júbilo inocente
de todo lo sido.

Pero si solo ausencia eres
prúrito indefinido de lo extinto
para que tantas palabras y sofismas
en medio de encalambrados poetas
de lo efímero.

Quédate con las medallas podridas
de tanto cuerpo ya atravesado
y déjame ir
allí donde tú nunca has de llegar.