jueves, 29 de abril de 2010

La mirada del otro

La poesia
es el camino olvidado
de la mirada del otro

miércoles, 28 de abril de 2010

burdeles

En lo largos pasillos
de los burdeles más olvidados
donde la espera urge
y algunas hembras bien paridas
cantan letanías sin fuero
a hombres sin consuelo.

Ahí es
donde la vida se estrecha
se consolida en un segundo
en tracto final y convulso
animal y sanguinario
de toda esta batalla que llaman
especie en supervivencia.

Poco mas
nos dicen los libros
y las buenas intenciones
de los samaritanos inducidos
a gloriar semejante guerra
no han sido invitadas
todavía.

Es tan triste todo esto
que parece que dios esta ocupado
entre espera y espera
al pago anodino trivial
de tanta desnudez y olvido.

lunes, 26 de abril de 2010

Cópulas de anfibios

Las babas de las ranas
en sus cópulas interminables
de anfibios inconscientes
y los trémulos pensamientos
de los financieros enloquecidos
tras la mirada culpable
de las últimas ganancias,
nada tienen que ver.

Ya ven.
Los tratados de hidráulica
las últimas corrientes filosóficas
y las noticias de los gobernantes
no han podido explicar
si todo lo que se desborda
llega a parte alguna.
Al soliloquio acelerado
del cerebro en combustión
o a la glándula sexual desconocida
todavía virgen y salvaje
de toda pastilla solución.

O si se disuelve beatíficamente
en los urinarios populares
de las fiestas de los pueblos.

En esta historia de sumideros
desagües y misterios
no hemos encontrado los canales
tubos y compuertas
que nos marquen dirección alguna.

Pero las manzanas
y la teoría de la gravedad
nos indican sin pasión alguna
que todo cae y se disuelve
sin rumbo en la madre tierra

Amen

sábado, 24 de abril de 2010

Sin rumbo conocido

Uno puede desear sombras
también montar sueños
o pensar en el santo carisma
de tu piel en brote permanente
tras los impulsos del sexo.

Todo puede ser
desde montar dinosaurios
en los parques infantiles
a soñar con viajes
de playas cristalinas
y mujeres de catálogo.

El barco del pensamiento
tiene tantos rumbos
como segundos el tiempo
pero el último viajero
que camino sobre los mares
acabó plagiado hasta el exceso
en las bóvedas más exquisitas
de los mejores palacios

Ya ves
hasta las cruces más sufridas
y su negocio de salvación
nada han comprendido

Palabra en busca de poema

Las palabras
han viajado hoy
como envoltorios de caramelos
de un poema a otro.

Se han gastado
como trapos de cocina
y han subido por las bocas transparentes
de los dedicados amantes,
y ya no dicen nada
muertos labios de terciopelo
en los borrachos de la madrugada.

Sólo el silencio
ha recordado en titulares
que podemos crearlas de nuevo.
Afortunadamente

viernes, 23 de abril de 2010

Preocupados por el exterior

Todo es un interior
un vacío de algo rodeado
con fronteras y bordes
y algunos papeles de propiedad.

El exterior no existe
nunca fue visto
nunca fue arañado
copulado o ultrajado
en su medida imposible

Y en ese interior
cálido como una mujer
atavaida de las mejores miradas
o tal vez frío y doliente
como un estepa de invierno,
- en todo él -
se han encontrado rosarios
de palabras que lo documentan
algunos dibujos de niños
sabores de imprenta en proceso
y algunas mentiras dislocadas

Según las últimas noticias
dios se pasea preocupado
por todo exterior
en una última soledad
que asusta un poco.

domingo, 18 de abril de 2010

El beso del elefante

Hoy es otoño
y las hojas de los árboles no han caído
y los enamorados no han salido a pasear
su famélico deseo de amor sazonado.

Nada ha ocurrido
de lo que normalmente ocurre
Nada ha tumbado la presunta inocencia
del asesino más exquisito.
Nada nos ha alumbrado
partos de palabras y discursos
en los mejores desiertos del pensamiento.

Hoy no ha sido un día normal

Estoy embrazado de palabras
y ni las moscas osan a molestarme
en los mejores cubículos
de las defecaciones más escuchadas.

Las sombras
se han pegado diligentes
a las figuras más livianas
y no hay presunción
de besos de elefante
en la mirada laminar del aburrimiento.

Hay miedo ahí fuera

jueves, 15 de abril de 2010

El muro

He colgado
del maldito muro
la sonrisa más eficaz
y quisiera ser absorvido
diluido y olvidado
en sus humedades
mas persistentes.

Ser cal yeso
argamasa bloque
de algo insípido
indefenso al eco olvidado
de palabras de aluvión,
muerto vertical
en el deseo articulado
de un poema diminuto.

Y en esta pose
de heroe desconocido
ver los fantasmas habituales
moviendo faldas comprometidas
y los últimos angeles conocidos
hurgando en las ferias más vergonzosas
de las últimas salvaciones

miércoles, 14 de abril de 2010

Nuestras valientes derrotas

Yo he sido
aquel que buscaba
agua fresca y serena
en el desierto de tus labios
y encontré baladas y palabras
en el compás de nuestros pasos.

Nada sé
de la carne canalla y perentoria
de todo lo imaginable.

Nada sé
de si el deseo
-en torrente apresurado-
dejó citas o venganzas
en los surcos acabados
de nuestros cuerpos abandonados

Nada de ello importa realmente.

Ya todo ha caído
en el pliegue ausente del horizonte
de aquella tarde enamorada
sin frentes de batalla
y llena de derrotas.

Nuestras valientes derrotas.

martes, 13 de abril de 2010

Aquel niño que fui

Las palabras
en sumideros de mentiras
van dejando excrementos
residuos legajos restos
de poemas abandonados
en las manos ya invisibles
de aquel niño que fui.

Dejo que la noche
y el agua y la tierra
en su ritual solitario
me vacíen en mi sombra,
mientras los testamentos
recorren salones
y rebaños de necios
copulan sin sentimientos
en los prostíbulos silenciosos
del olvido venidero.

domingo, 4 de abril de 2010

La historia jamas contada de uno mismo

La historia jamas contada
de uno mismo
esta llena de olvidos
algunas travesuras
y la constancia segura
de no haberse conocido suficiente
o de haberse dejado en el tintero
algunas intenciones imposibles.

Ahora que ya no creo
en el olor pegajoso del amor
y la confianza de los hombres
es una bola de humo,
y todo corre como un tropel
de toros desesperados.

Ahora,
pienso que estoy preparado
para no asustarme suficientemente.

sábado, 3 de abril de 2010

Ojos prehistóricos

Se va cerrando sin pasión
el ojo interrumpido
del horizone del mar
y la noche más oscura.

Desaparecen los navíos errantes
en sus oxidados cascarones
y los amantes lanzan su piel
al descalabro hormonal
de la pasión sin límites.

Todo llega a su fin
en la marea de un mar infinito
y la siempre humilde categoría
del olvido llega como un sueño
inconsciente y divino.

Nada ha cambiado
desde que el mar es mar,
ni el deseo branquial de la vida
ni el trazo gutural del odio
en medio de tanto desperdicio
de hombres y mujeres,
vólumenes divertidos
de algún cuadro conocido.