miércoles, 6 de mayo de 2009


Más allá
de los adictos enjambres del deseo
del abrasado fragmento del avaro
ante el vertigo de la pobreza
del descenso involuntario del muerto
al ritual velatorio de los vivos
del testimonio suicida
de la víctima en el último día.

Más lejano de todo ello,
dime tú palabra sin entraña
auténtica baba de dinosaurio
que has convertido parcelas de leche
en escriturados sudarios de odio,
si levantarás tu pezuña insomne
para pedir alguna pregunta de engaño
o llegarás con letanías de tasadores
para venderlo todo infinitamente
ante el mausoleo de silencio
que nos comerá un día.

2 comentarios:

Ana Márquez dijo...

Un curioso poema, lo de la "baba de dinosaurio" me ha parecido una imagen realmente poderosa y original. Tienes mucho talento, felicidades. Saludos cordiales de una compañera en la apasionante aventura de la palabra.

Anónimo dijo...

Gracias Ana, ha sido un placer tu comentario.
Este blog es un rincón muy olvidado, apenas estamos yo y mis manojos de letras.
Y algunos como tú.
Escribir es siempre una cuenta pendiente, la verdad.Algo así como estar vivo cada día.

Seguiremos escribiendo, aunque cada día estoy más convencido de que no sirve para nada.Aparte del gusto estético de uno mismo, claro.

Un abrazo muy grande
Alberto