.

hay un sueño
virginal permanente
al final de nosotros mismos

De la soledad y otros demonios

De la soledad y otros demonios
hace tiempo que no hablamos.

Hay un cuerpo esclavo
que me sigue a todas partes
y me muestra el mundo permanente,
duro y mísero valuarte
de primates llamados hombres.

Y entre tanto dislate
uno se refugia cobardemente
en la palabra memoria,
o en la memoria imaginaria ya olvidada.

Aquel olvido
del soldado muerto en batallas peregrinas
o la sonrisa sorprendida de la novia cumplida
ya sin nombre en el húmedo fotograma.

Todos son memoria sin recuerdo
imaginario colectivo,
estandarte de batallones
o deseo cariño eterno.

Por ello no pienses que hablamos solos,
al mismo tiempo hablan infinidad de muertos
que reposan vivamente en nosotros mismos,
nos tuercen torrentes de palabras
nos crean deseos inalcanzables
o aman silenciosamente
entre jadeos prohibidos.

Somos tránsito perpetuo
de tantas impresiones
y de tantas redenciones,
que somos todo ajeno
menos nosotros mismos.

Siempre
la soledad me dice
que la historia nunca se arrepiente
y los demonios lloran permanentemente

INTERENTIUM

Estoy volviendo otra vez
al primario anverso de la nada
donde el vacío se recubre de un caos miserable
y la palabra fría
espera ….desnuda y eterna
el silbido tenue del pensamiento.

Allí donde el rabo del olvido
nos dejó sin nacer
en el limbo oscuro
de lo no ocurrido.

Allí donde no existe
no siquiera el polvo de las religiones
consuelo y miedo
ruego y pasión
muerte y horror.

Aquí estoy
palabra eterna
esperándote otra vez
piélago del recuerdo
desnudo y virginal
como mujer eterna.

ko kou (CHAD) 0711

viaje a uno mismo

Uno puede viajar siempre
en un viaje incabado
entre montañas de recuerdos
valles de olvido
y brumas de lo imaginario.

Todo es uno por momentos
los muros de lo tangible
el fluido etéreo de lo supuesto
y la gracia siempre viva
del sentimiento a cada paso.

La vivencia
como materia condensada
soluto precipitado
crea siempre un sólido equipaje
que no tiene lugar
que nos sorprende siempre
que nos recuerda por momentos
donde el único conocimiento
puede ser la ignorancia inocente
de uno mismo.

Es difícil conocer
al personaje propio
parapetado todos los días
sobre uno mismo
esquilmado de fustraciones
y colgado como abrigo viejo
del perchero del alma.

Pero los otros están ahí.
de ellos, de sus miradas
de sus palabras y gracias
puede conocer uno mismo
que alguien esta ahí
dentro de nosotros mismos.

abeche (CHAD)
dic 2007

.

dios era niño
levantó un dedo
y su sombra sedujo al universo

dios se fue
alguna luz también

el mundo quedó solo
alrededor de si mismo

el hombre llegó mas tarde
equivocadamente

llegaste desnuda a mi lecho

Llegaste desnuda a mi lecho
rompiendo una tarde de verano
sabiendo que mi maltrecho cuerpo
serviria de antojo de deseo

la luz
nos enviaba mantos de sombras
alli donde el tacto marginal
agonizaba secretamente

un pudor polifonico
recorria nuestros cuerpos
titeres de un rito ancestral
notas de partitura sin dueno

yo te buscaba dentro
insistente…. jadeante
y me encontre a mi mismo
repetido millones de veces
y es que un hombre mil veces
es una muejr una vez

La luz nos alquilo
una casa de sombras
para no encontrarnos
estabamos juntos una vez mas

Hay un tipo de locos

hay un tipo de locos
que responden a preguntas nunca hechas
imaginan mundos no vistos
y viajan como titeres mudos
en dimensiones imposibles

algunos escriben
cuestiones que se entienden
cien anos despues

otros se involucran
en historias pasadas mil anos atras
con el detalle del cronista
o la pasion del enamorado

nunca estan en el presente
y si lo estan
andan sobre el mar
o buscan rebanos de hombres
con mensajes prohibidos

son duenos de carceles infinitas
del tiempo inacabado
o de la materia imposible

algunos suenan palabras
llenas de silencios de locura

vieja de una sombra

el alma llego
en el viaje quieto de una sombra
a llenar mi cuerpo
a saber de una existencia
a existir de forma inminente

todo fue y ya es
todo es lo que ya fue

las miradas

Las miradas
se ocultan siempre
tras el polvo rutinario del mundo

Atras queda uno mismo
la mirada cerebral del pensamiento
la opinion perdida en la memoria
del fotograma del momento

Todo se pierde rapido
como una tormenta de verano

y la vida pasa
nosotros parapetados
tras el flujo feliz de la existencia
de una existencia inconsciente y permanente

atras queda todo
incluso nosotros mismos

Los otros en uno

Uno no es uno mismo
sin ser otros muchos

Pasea el caminante por la desierta playa
encuentra restos de conchas
recuerdos de tormentas
amparo de suspiros encontrados

Asi somos
restos de otros que se cruzan
conviven o se desviven por uno
unos otros que ya son uno mismo

No se pueden olvidar
y menos los que ya nunca encontraremos
No nos podemos olvidar
de nosotros mismos
de todo ello que somos sin saberlo

Uno no es uno mismo
sin ser otros muchos